Son las 17.00h del 8 de febrero de 2016 y nos encontramos en la sede de UGT en Madrid, conocida como “la casa del pueblo”. Hemos sido convocados para hablar sobre el conflicto existente en dos empresas del aeropuerto de TFS, IBERIA y AVIAPARTNER.
Se inicia la sesión a cargo del secretario que expone lo siguiente: “la comisión no puede pronunciarse porque la convocatoria no cumple los preceptos de dicha comisión” (Art.15. d.) del convenio sector de handling. Alegan no tener “conocimiento formal” de los hechos que CESHA denuncia y que habiéndose producido ya la convocatoria de la huelga, no procede seguir hablando.
Frente a esta sorprendente afirmación, se recuerda que CESHA informó a la comisión del anuncio y preaviso de huelga en Iberia el día 18 de enero y ante el requerimiento de más información, el 25 de enero se envía información adicional.
El 27 de enero se notificó por burofax el preaviso de la convocatoria de huelga en AVIAPARTNER por el despido de 9 trabajadores. Con fecha 01 de febrero, CESHA recibe una notificación invitando a personarse en Madrid el día 8 de febrero.
Con todo, consideramos una falta de respeto que después de haber cumplimentado todos los requisitos exigidos por parte de la comisión, se citara a los representantes de CESHA procedentes de Canarias y Barcelona para no entrar a debatir la problemática planteada.
No obstante, después de tratar de desencallar las interpretaciones normativas, el abogado de Coordinadora instó a las partes a entrar y poner sobre la mesa la interpretación del convenio en lo relativo al encuadramiento de niveles en las nuevas empresas de los trabajadores subrogados de Groundforce a Iberia, así como el despido de los 9 compañeros de AVIAPRTNER en TFS, a lo que la parte social se pronunció de manera contundente, en especial, el representante de CCOO, el Sr. Carrillo (TCP de Iberia ya jubilado), afirmando que “no entendía por qué estábamos allí y que la comisión no tenía nada que evaluar”, comentario que encendió los ánimos de los representantes de Coordinadora.
La actitud de desprecio, mala educación y arrogancia manifestada por ese Señor, puso fin a una reunión que sólo sirvió para poner de manifiesto en manos de quiénes estamos y lo mal que lo tenemos los trabajadores de aeropuertos.
La visión percibida por la delegación de CESHA fue clara: existe una estrategia clara por parte de la comisión paritaria del convenio del sector de handling para desacreditar cualquier exigencia y/o demanda que provenga de organizaciones que no son cómplices de la pérdida de derechos y condiciones. Porque lo que se pretende en el fondo es tener el control y un derecho de veto sobre las legítimas reivindicaciones de los trabajadores cuando ven sus derechos pisoteados, incluido el derecho de huelga.
Ni los despidos, ni la pérdida de derechos, ni el chantaje que sufrimos diariamente en nuestros puestos de trabajo son suficientes para que esta casta de liberados, atrapados en sillas, poltronas y favores, defiendan y se pongan en el lugar que les corresponde.
Por cierto, las empresas allí representadas apenas manifestaron nada.