La quiebra de Spanair ha sido el último golpe que hemos recibido los trabajadores de aeropuertos. Como un castillo de naipes se ha ido desmoronando todo lo que giraba en torno a la compañía aérea (Newco, servicios de limpieza, mantenimiento, catering…). En Iberia no estamos exentos de problemas.
La creación de Iberia Express ha generado un debate interno muy potente entorno a modelo a seguir. Los sindicatos siguen divididos mientras la dirección de Iberia sigue adelante con un proyecto que pensamos, no beneficia al futuro de la aerolínea y menos a sus trabajadores. Seguimos pensando que la mejor opción es la operación con recursos propios en el marco de la actual Iberia, con una vocación clara de servicio y así lo corrobora nuestra dilatada experiencia; y por otro lado pensamos que las garantías de empleo que se ofrecen son vagas y difusas, que la actual situación económica no permite garantizar nada y que lo que garantiza nuestro trabajo es la apuesta por los concursos de handling.
Cuando se constituyó CESHA, La Coordinadora, uno de nuestros principios fundamentales fue abogar por la unidad de todos, pensar como un solo grupo de empleados de aeropuertos que compartimos los mismos problemas y espacios de trabajo. Tenemos que concienciarnos de que no somos trabajadores de compañías aéreas o de operadores de handling: somos trabajadores de aeropuertos.
Hoy trabajamos para unos, mañana para otros pero siempre en el mismo espacio. Asumir esto significa que lo que afecta a un grupo de trabajadores, nos afecta a todos y que sólo desde esta premisa podremos conseguir que nuestras condiciones no se degraden, porque mientras nos debatimos en diatribas y particularidades, los empleadores se benefician de nuestras diferencias. Los estibadores portuarios lo consiguieron.
Ante la falta de un proyecto claro y que garantice nuestro futuro como empresa ha sido convocada una huelga por diferentes sindicatos de todos los colectivos, tierra y vuelo, con el fin de que Iberia reconsidere la decisión de externalizar el corto y medio radio. Apoyamos cualquier iniciativa que se tome y que tenga como objetivo aunar y defender los intereses de los trabajadores, al margen de las siglas y las ideologías, sin obviar que estamos en un momento crítico de crisis y de quiebras de otras líneas aéreas y con un mercado laboral feroz.
No podemos olvidar tampoco la mayoría votada por los trabajadores en las pasadas elecciones sindicales de tierra que legitiman los acuerdos suscritos entre la empresa y CCOO y UGT; y que podrían condicionar el futuro de la aerolínea. Unos acuerdos que no aceptamos por ser imprecisos, carentes de contenido y que no obedecen a la realidad que estamos viviendo.
Por tanto, seguimos defendiendo como única garantía real de empleo la creación de Iberia Express dentro de la estructura de la compañía y la apuesta definitiva por el negocio del handling.
La huelga es un derecho individual que debe ejercerse con responsabilidad y este es un momento crucial para el futuro de todos nosotros. No dudes en ejercerlo.